El 7 de junio de 1965 fue un día muy relevante en la historia de la informática. La monja Mary Kenneth Keller recibió uno de los dos primeros títulos de doctor/a en ciencias de la computación de la historia. El primero, por la Universidad de Washington, fue concedido a Irving C. Tang.
Nacida en una familia católica de origen irlandés, había ingresado en 1932 (con 19 años) en la congregación de Hermanas de la Caridad de la Santísima Virgen María en Dubuque (Iowa). Después de 8 años como novicia, tomó sus votos en 1940. Y después de esto, empezó su trayectoria académica en el ámbito científico, obteniendo una licenciatura en Matemáticas en 1943 y una maestría en Matemáticas y Física en 1945 .
Así, cuando su orden religiosa fundó la Universidad Clarke en 1964, se convirtió en el primer centro universitario en ofrecer el título de ciencias de la computación en EE.UU. al frente de este título. Mary Kenneth Keller fue nombrada directora del Departamento de Tecnología durante dos décadas, hasta pocos meses antes de su muerte en 1985.
Fue pocos meses después de esto cuando, habiendo cumplido los 52 años, le fue concedido el doctorado por su tesis "Inductive Inference on Computer Generated Patterns" , centrada en el desarrollo de algoritmos capaces de hacer una diferenciación analítica expresión algebraica.
El lenguaje de programación que utilizó en los algoritmos planteados en su tesis era el FORTRAN, a pesar de que un año antes ella misma se había convertido en una de las tres personas creadoras de otro lenguaje llamado a ser aún más popular que aquél : el "Beginners' All-purpose Symbolic Instruction Code", más conocido como BASIC .
En 1958, la Universidad de Dartmouth había decidido saltarse su norma de aceptar sólo a hombres (vigente durante 188 años) para permitir el ingreso de Keller como investigadora para su Centro de Computación, donde empezó a colaborar con John George Kemeny y Thomas Eugene Kurtz. De esta colaboración surgió el dialecto original de BASIC (conocido como Dartmouth BASIC), del que se suele citar a sus colegas masculinos como únicos creadores.